Estamos «disfrutando» de una época basura.
Una época que desaparecerá casi sin rastro.
Todas las fotos, todas las películas, todos los escritos, todos esos mensajes tan importantes en las redes sociales, todas las criptomonedas…
Todo ese reflejo de nuestra época actual desaparecerá cuando se desenchufe internet.
Pero es que luego, el papel en el que la gente imprime sus fotos y sus escritos, es más, el papel en el que se escriben los libros actuales es tan pésimo, que se deshará con el paso de un mínimo soplo del tiempo.
Y qué decir de los edificios, no solo feísimos, sino que están construídos con materiales tan malos que el tiempo no los respetará, quizás nada que objetar aquí.
Y qué decir de las carreteras y calles que son asfaltadas de tal forma que a los pocos meses ya se resquebrajan.
Estamos en una época efímera, de mucho orgullo, que con justicia caerá pronto en el olvido como si de un instante en la nada haya sido.
Sin duda en la antigüedad caminaron por este mundo personas más inteligentes que en la actualidad, personas que supieron marcar su huella por los siglos de los siglos.
Ahora, bueno… ¿un selfie?
El blog personal de José Manuel Goig 
quedará como época de reflexión en la que el descubrimiento fue la red social y los movimientos populares, tanto digitales como físicos, y se devolverá el respeto por el ser humano y podernos mirar a la cara sin sentir verguenza.
En parte estoy de acuerdo, pero me temo que el colectivismo está en contra del espíritu humano.